La historia de «Razzia» nos traslada a Casablanca, ciudad vibrante y áspera, atractiva pero implacable. Entre el pasado y el presente, cuatro seres en busca de la libertad persiguen sus deseos treinta años después de que un apasionado maestro en las montañas del Atlas fuera obligado a renunciar a su idioma y a la enseñanza de determinadas asignaturas. Rostros distintos, trayectorias distintas, luchas distintas, pero los mismos anhelos.

Hakim (Abdelilah Rachid), joven homosexual que vive en la Medina tradicional y pobre, sueña con ser una estrella de rock y con el respeto de su padre. Salima (Maryam Touzani) vive entre el desafío y la resignación, casada con un hombre que, bajo una aparente modernidad, la quiere sumisa. Joe (Arieh Worthalter), dueño de un restaurante judío, elige vivir en la Casablanca con la que fantasea desdibujando su realidad y soportando un antisemitismo rampante. Inès (Dounia Binebine), joven y rica, encerrada en una torre de marfil, se mueve entre la tradición y la modernidad mientras se ocupa de su despertar sexual. Y el rugido de la revolución que sube poco a poco, alimentado de los deseos de libertad de miles de personas que no pueden expresar lo que realmente son.
Escrita y dirigida por Nabil Ayouch («Much loved», «Los caballos de Dios», «Mektoub», «Ali Zaoua, príncipe de Casablanca», «Much loved») y presentada en la sección oficial del Festival de Toronto 2017, «Razzia» es, según su director, una película coral que cuenta las luchas de cada uno de sus personajes en el Marruecos de ayer y de hoy, para que se escuche lo que son y para que su deseo de libertad prevalezca por encima de todo.

Nabil Ayouch, ganador de múltiples premios internacionales con títulos como «Los caballos de Dios» y cuyo último trabajo, «Much loved», fue prohibido en Marruecos, añade sobre «Razzia», película cuyo motor de partida fue su propia experiencia personal sobre la intolerancia social y religiosa: «Las grandes revoluciones comienzan con pequeñas revoluciones individuales. Lo que ocurrió en el mundo árabe durante la primavera de 2011 no fue sino el culmen de una serie de frustraciones, humillaciones, ignorancias, retrocesos en los derechos civiles fundamentales. Estos grandes movimientos populares que hicieron tambalearse a los gobiernos estaban formados por seres humanos que habían hecho su revolución interior, íntima, antes de expresar su cólera en las calles. Tenía ganas de acercarme a ellos, de comprender qué es lo que lleva a algunos a resistir y a otros a abdicar.»
«En Marruecos, donde yo vivo, he visto evolucionar a la sociedad, desde una forma de vida comunitaria hasta la exclusión sectaria de todas aquellas personas que sobresalen, que desbordan el marco. El proceso de arabización iniciado a principios de la década de 1980 es devastador, porque quiso erigir una regla de pensamiento único, expulsando toda forma de crítica. Los diferentes ataques que mis actrices y yo sufrimos después de haber hecho mi película «Much loved» me demostraron hasta qué punto, cuando se abordan temas sensibles, la masa puede fácilmente atravesar la frontera y pasar de la escucha a la condena, al anatema y después a la violencia.»

«Acusé todo esto como un despertar brutal, un desencadenante. Sentí la urgencia de decir y, más que nunca, la de mostrar. Siempre he sentido la necesidad de hablar de lo que nos hace daño y de lo que quisiéramos distanciarnos. Me gusta dar cuerpo a esos personajes a quienes se intenta silenciar e invisibilizar, empujándolos a los márgenes.»
«Con «Razzia» he querido ir aún más lejos y explorar el alma de la mayoría silenciosa, ese ejército de las sombras que no se expresa con fuerza suficiente y que, sin embargo, tiene derecho a reivindicar su derecho a la existencia. Al hablar de ellos, hablo de nosotros, de nuestras derrotas, de nuestros sueños rotos u olvidados. Hablo de lo que hace que una sociedad siga en pie y apegada a los valores universales o que abandone a los más débiles y se hunda en el totalitarismo.»

Duración: 119 min.
Género: Drama.
Países: Francia, Marruecos, Bélgica.
Año: 2017.
Estreno en España: 4 enero 2019.
Distribuidora: Pirámide Films.
Calificación por edades: No recomendada para menores de 16 años.